A veces la vida es injusta, y tú tienes que aceptarlo y avanzar y no usar eso como excusa.
– Robert Kraft
Siguiendo con las creencias que aprisionan, hoy toca hablar de la trampa de la justicia.

Las creencias que aprisionan, tienen en común que nos aprisionan porque son cosas que creemos que “deben” ser de cierta forma, o que “tenemos” que tener.
El “debo” y el “tengo”, son palabras tóxicas para nuestra salud mental, porque nos forman expectativas donde, si no tenemos lo que “deberíamos” tener, nos parece injusto no recibirlo, y comienza nuestra frustración, molestía con la vida, estrés e infelicidad.
La falacia de justicia.
La falacia de justicia es una distorsión cognitiva, que es un error al procesar las cosas que nos pasan, la falacia de justicia hace que vivamos esperando justicia del mundo y de los demás para nosotros, y es un problema por un ligero detalle:
“La vida no es justa, la vida sólo es.”
- ¿Te ha pasado que te frustran los demás, porque no parecen esforzarse, mientras que tú tienes la capacidad de mejorar?
- ¿Sientes envidia de los demás que obtienen cosas con menor esfuerzo que tú?
- ¿Te frustra que la gente mala no sea castigada?
- ¿Usas la venganza como reacción cuando alguien hace algo que no te gusta, aunque fuera sin querer o incluso te quiera compensar por su error?
Si dijiste sí a cualquier opción de arriba, sufres de la falacia de justicia.
Consecuencias.
Las distorsiones cognitivas son muy problemáticas, porque se basan en modos idealistas de ver al mundo, pero como el mundo no es perfecto, difícilmente se cumplirán, esto causa emociones negativas, como la vida no es justa, si esperas justicia, vas por el camino del estrés y la infelicidad.
El problema principal de exigir justicia, es que, o te vas a frustrar mucho porque la justicia no se hará siempre, o te volverás agresivo(a) para que se cumpla la justicia, ir con agresión por la vida, es muy difícil y problemático.
Otro detalle, es que, esta idea en parejas, causa conductas pasivo-agresivas, que es cuando agredimos por medio de “hacernos los(as) difíciles”, respondiendo de forma grosera, o causando celos a la pareja, no hablándole sin razón, o cosas así, esas conductas, dañan mucho una relación de pareja.

Formas útiles de responder.
Para que no te afecte la falacia de justicia, primero debes reconocer algunas cosas:
Los demás no son iguales a tí
Si esperas que los demás te traten igual, que sean igual de capaces/pacientes/amables que tú, estás perdiendo tu tiempo, todas las personas son diferentes, y las cosas que tú consideras que todos deberían hacer (esforzarse más, no quejarse, ser honestos{as}), pueden no ser importantes para las demás personas, por tanto, no será importante para ellos hacerlas.
No puedes controlar lo que los demás hacen o no hacen, sí puedes controlar tu comprensión de que son diferentes, y tus acciones, si alguien hace algo que no te gusta muchas veces, y lo puedes evitar o “sacarlo(a) de tu vida”, puedes hacer eso también, otra opción sería comentárselo constructivamente con el fin de ayudarle, pero puede causar que se sientan ofendidos(as), lo mejor es que voltees a otro lado si no puedes cambiarlo.
La justicia es sólo tu percepción.
La capacidad no lo es todo, hay personas que aunque parezca que se esfuerzan poco, realmente se esfuerzan pero no lo vemos, hay personas que parecen tener todo de la forma fácil, pero enojándote con ellas, no ganas nada, quizás observándolas positivamente, puedas aprender algo que te ayude a triunfar más fácil.

Recuerda que al juzgar a otras personas, estás viendo su historia desde tu lado, y por eso puedes no comprender sus luchas y logros, en lugar de simplificar sus logros con que tienen buena suerte, pon atención a sus cualidades para que crezcas tú tambíen.
No al castigo divino.
No puedes esperar un castigo divino a las personas “malas”, porque simplemente no funciona así, todos los “castigos”, son consecuencias de lo malo que hagan, no de justicia, las cosas suelen caer por su propio peso, si una persona obra mal, otras no le creerán, se distanciarán, o la buscarán sólo cuando puedan obtener algo.
Aún así, tú no puedes acelerar esos castigos, y si lo haces, no estarás siendo justo(a), porque la justicia se va dando con las consecuencias, no con agresiones tuyas, que te harán perder tiempo, quizás dinero, y más importante aún, tu tranquilidad.
La agresión es una forma inútil de resolver problemas.
Si actúas agresivamente, no estás haciendo justicia, estás haciendo agresión, y la agresión sólo causa problemas.
Puedes enojarte porque las personas te hagan cosas injustas, pero la venganza difícilmente te hace cambiar algo, en lugar de usar tiempo y esfuerzo para planear una venganza, puedes dedicarlo a manejar tu enojo y a hacer algo que te sirva para estar mejor.
Para concluir
Es muy bueno buscar la justicia, porque así somos más cooperativos con otros al tener compasión de los demás y buscar hacer lo correcto, si eres una persona justa, créeme que todos te lo agradeceremos.
Eso sí, lo único que puedes hacer para buscar justicia fuera de tí, es pedirlo por las buenas, si los demás no quieren cambiar, darle vuelta a la página, no hay nada más que hacer.
Esta creencia y muchas más, se tratan con una técnica llamada Terapia Cognitiva de Beck, si quieres más información sobre ella, o te interesa una intervención psicológica con este enfoque, te invito a hacer contacto conmigo aqui, o por los medios de contacto ubicados en la parte de arriba.
Deshacerte de estas ideas, te puede ayudar a explotar más tus habilidades, controlar tus emociones, mejorar tus relaciones y ser más feliz, es quitar tus obstáculos mentales para explotar tu potencial.
Más adelante iré hablando sobre las demás creencias, si te interesa, te invito a suscribirte a mi página de Facebook, donde se suben los artículos nuevos sobre psicología infantil, y consejos para relaciones de pareja y salud mental personal.
Gracias por leer hasta aquí, espero que esta información te sea de mucha utilidad.