El razonamiento emocional es una de las distorsiones que son más complicadas de detectar, esto es porque tiene que ver mucho con nuestras emociones, a la vez nuestras emociones “nublan” nuestra capacidad de pensar de forma clara.
Quizás te ha pasado que a veces sientes que hiciste algo mal, o que hay un defecto muy grave en tí, y el problema es que se siente demasiado real y no encuentras formas de pensar de forma distinta.
Y eso es el razonamiento emocional, cuando piensas que algo es real, porque se siente real.
Hay dos tips que te puedo compartir para poder manejar el razonamiento emocional:
El primer tip es separar las cosas, por más que sientas algo, es bueno recordar que sin pruebas, lo que pensamos o sentimos son impresiones, interpretaciones, juicios y sí pueden ser ciertos, ¡pero también pueden ser falsos, o exagerados!, esto sirve para quitarle su poder de distorsionar tus ideas.
El segundo tip es confirmar con la realidad, esto puede ser con preguntas como:
- ¿Qué pruebas tienes de lo que sientes?
- Ok, sientes eso, ¿qué otras posibilidades hay?
- ¿Esa impresión te sirve, o puedes buscar otra que te sirva más en ese momento?
Otra forma de confirmar la realidad es preguntar a los demás para confirmar los hechos, puedes preguntar a alguien confiable para contrastar, con frases como “yo siento esto pero no estoy segur@, ¿tú que opinas?
Es cierto que a veces nuestras emociones y pensamientos pueden chocar entre ellos, pero entonces podemos recurrir a nuestros sentidos, a personas de confianza, y a nuestra capacidad de buscar interpretaciones alternativas que funcionen mejor, aunque sea por un rato, luego seguir avanzando.